lunes, 28 de mayo de 2012

Desertores


Tiempo de desertores
errantes y confundidos.

El mangrullo es espejismo
entre recuerdos estaqueados.

Soledad Lorena
28 de Mayo de 2012


(Me quedaron las imágenes gauchescas;  el 25 de mayo vi la versión animada del Martín Fierro por Fontanarrosa y me impactó la vigencia del autoritarismo y las injusticias. De todos modos, este poema, no tiene que ver con esa temática, sólo las imágenes se colaron en los versos.)

jueves, 24 de mayo de 2012


"No quiero ser parte de tu mundo,
a veces me alcanza...
con que tu piel me nombre."








Soledad Lorena
En el filo de la media noche
23/24 de Mayo 2012

lunes, 21 de mayo de 2012

Requisitos


Para ser artista del amor
deberías primero con cincel
derribar el monumento de tu ego.

Para ser navegante de mi piel
tendrías que deshacerte
de antiguas bitácoras y mapas.

Para conquistar mis tierras
deberías ser Atila de tus feudos
y enarbolar mi nombre en tus estancias.

Para desnudar mi corazón
es preciso que vistas del revés
derogando arlequines y antifaces.

Para embriagar mi aliento
tienes que conocer la palabra sagrada
y  leer en mis ojos el poema sin verso.


Soledad Lorena
21 de mayo de 2012


Poema barato


Migajas de pan leudado
en claustros oscuros
deshabitados de pasión.

Los espejos no se pulen
en baldosas de plástico gastado.

Los mandalas no se encuentran
en reflejos de neón.

Los pétalos no florecen
bajo manos mercaderes
de pieles sin corazón.

No se aprenden los conjuros
leyendo libros de mesón.

No se aprende de poesía
macerando mariposas
en el burdel de la vida.

Soledad Lorena
21 de mayo de 2012

sábado, 19 de mayo de 2012

Apuntes sobre el día después



El mejor antídoto para el deseo, es la indiferencia y la desidia del día después.

Puede ser un beso, una charla, un enredo de abrazos, una palabra o toda una confesión, una caricia o una mirada.

Cuando una mujer escucha la aldaba y al abrir la puerta, el viajero temeroso o confundido se esconde a la vuelta de la esquina…

Los muros se reconstruyen en nuevas coordenadas y el domicilio de nuestros nombres, es un recuerdo difuso en un cielo sin soles.

En el foso de tus silencios
tropezarán tus intentos.

Soledad Lorena
19 de mayo de 2012

“There is never a second chance to give a first impresión.”
Old Saying



Intenso


Intenso es el instante
cuando la marea sube
y en la costa de mis labios
tus besos como olas
arrebatan la rutina.


 Soledad Lorena
Inevitable sensación
de albergar tus besos
aún en la distancia.
18 Mayo 2012

miércoles, 16 de mayo de 2012

Dicen los por ahí, que el amor no existe, que las expectativas, ilusiones y sueños que muchas mujeres tenemos, es porque leímos demasiados cuentos de hadas, príncipes y princesas; o que leemos mucho o que vemos películas románticas.  Concluyen que esperamos algo que sólo existe en la ficción, decretan que debemos conformarnos con un “proveedor”, un acompañante o amante de turno que apenas si conozca la existencia de nuestro corazón.

Sin embargo, escucho por las noches, programas de radio, dónde la gente se dice cosas lindas, donde se piden perdón, dónde cuentan historias de amor con nombre y apellido, dónde se dedican canciones sin miedo a ser vistos como cursi.

Inevitablemente descreo de tanto vaticinio racional y me aventuro a pensar que equivoqué las coordenadas.  Porque en las noches de sueños tranquilos, puedo aún ver y sentir que alguien me encuentra y me mira sin miedos, y me ama sin sombras.

Será… que si tejo con hilos de colores un globo gigante,  que los vientos alisios de mi corazón eleven; que si tejo con lanas suaves y mullidas una alfombra mágica; encontraré por fin mi rumbo, y en ese cielo mi nombre será tu sol naciente.

Soledad Lorena
16 de mayo de 2012

Mercy and Miracles

Times to be successful and glorious,
To show no pain, failure or sorrow,
That’s what people say.

From NLP to meditation,
From daydreaming to dream boards,
From prayers to affirmations.

But one deserves the right
After so many years
Of struggling, thriving and surviving,
To get tired and hopeless
To feel desperate and surrender.

Despite faith and God’s love,
No matter how hard I may try,
There are times when steps lead nowhere,
The sky shows no map or sunrise,
And the mud gets thicker and thicker
Under my bare feet.

This is a time of getting weaker and weaker,
Of not eating properly but once in a while,
Of not getting nurture for the soul or heart,
Of not being successful or prosperous,
Of saving energies and breath
For the day yet to come.

The mind gets cloudy,
The heart gets gloomy,
The flesh gets useless,
And so the days
Get darker and empty.

It’s time for expected miracles,
It’s time for God’s mercy,
It’s time for checkmate,
It’s time for generous help,
That’s what my heart says.

Soledad Lorena
May 16th 2012

miércoles, 9 de mayo de 2012

Presente

Imágenes cristalizadas,
espejos atomizados,
migajas de vidrio,
colores pixelados.

Los momentos exiliados
vagan en el pasado,
apenas si devuelven
una ceniza vetusta.

No encajan rompecabezas,
no se teje lo destejido,
no se pinta lo desteñido;
el presente es un lugar
donde se escribe en hoja nueva.

Soledad Lorena
9 de mayo de 2012

Desertores

Desertar: abandonar el soldado sus banderas; abandonar una causa.


Desertores de la vida, el amor y la pasión, cansados de vagar entre malones, jaurías y cardones, regresan cabizbajos jugando al distraído. 

Sin embargo, el mangrullo es un fantasma de recuerdos sin nombres y el fortín apenas dibuja una ruina de muros que migraron lejos del desierto y el olvido.

Mi nombre habita en aquel planeta donde la rosa aprende de principitos y poesía, donde la magia no se condena, donde el amor exultante no espanta y la mujer salvaje desnuda sus pétalos sin miedo.

No me busques entre sepulcros, no me llames desde las sombras, no me escribas desde tu incertidumbre, no me midas desde tus cercos.

Encuéntrame en la luna que reina aún en la mañana, alcánzame en la lluvia de estrellas que ves cuando cierras los ojos, sedúceme desde tu coraje sin mella, invéntame con nuevos colores, disfrútame cuando desnudes tu corazón.


Soledad Lorena
Vigía desde el universo
9 de mayo de 2012

martes, 8 de mayo de 2012

Hojarasca


Bajo mantos de hojarasca
duermen tumbas sin su cruz
lápidas sin nombre,
decretos de ilegible firma,
preguntas que no encontraron eco,
cartas que jamás se escribieron,
y promesas nunca susurradas.

De silencios y distancias
están altos los muros
y no hay mapa que guíe
el sendero del recuerdo.

Todo corazón tiene un camposanto
y la piel de la serpiente aprende,
para no guardar las huellas,
para no añorar nómadas del desierto.

Buscas una aldaba que se quedó sin su puerta,
imaginas un libro sin omisiones ni olvidos,
quieres leer una página que apenas si escribiste,
y sin embargo…
en la distancia tu palabra
es el viento que inquieta,
deshace la hojarasca
y reinventa el recuerdo.

Soledad Lorena
8 de mayo de 2012
Visitando altillos, revolviendo archivos, caminando entre sepulcros.


lunes, 7 de mayo de 2012

Being in the right place with the right people

'Being with real people who warm us, who endorse and exalt our creativity, is essential to the flow of creative life.  Otherwise we freeze.  Nurture is a chorus of voices both from within and without that notices the state of a woman's being, takes care to encourage it, and if necessary, gives comfort as well.  I'm not certain how many friends one needs, but definitely one or two who think your gift, whatever it may be is "pan del cielo", the bread of heaven.'
(Clarissa Pinkola Estés, Women who run with the wolves)

Sobre el invierno interior

(Fragmentos del análisis del cuento “La vendedora de fósforos”)

El hecho de estar con personas reales que nos confortan, nos apoyan y ensalzan nuestra creatividad es esencial para la corriente de la vida creativa. De lo contrario, nos morimos de frío. El alimento es un coro de voces tanto interiores como exteriores que observa el estado del ser de una mujer, se encarga de darle aliento y, en caso necesario, también lo consuela.
No sé muy bien cuántos amigos se necesitan, pero está claro que por lo menos uno o dos que nos digan que nuestro don, cualquiera que éste sea, es pan del cielo. Toda mujer tiene derecho a disfrutar de un coro de alabanzas.
Cuando las mujeres se quedan solas en medio del frío tienden a vivir de fantasías en lugar de emprender una acción. La fantasía de este tipo es la gran anestesiadora de las mujeres.
Conozco a mujeres dotadas de unas voces bellísimas y a otras que son unas extraordinarias narradoras de cuentos; casi todo lo que sale de sus bocas posee lozanía y está elegantemente cincelado. Pero ellas se sienten en cierto modo aisladas o privadas de sus derechos. Su timidez constituye a menudo la tapadera de un animus medio muerto de hambre. Les cuesta comprender que cuentan con el apoyo interior o con el de los amigos, la familia o la comunidad.
(…)
Cualquier persona que no apoye tu arte o tu vida no merece que tú le dediques tiempo. Muy duro pero cierto. De otro modo, la mujer pasa directamente a vestir los andrajos de la niña de las cerillas y se ve obligada a vivir una cuarta parte de su vida que congela todos sus pensamientos, su esperanza, sus cualidades, escritos, obras teatrales, diseños o danzas.
(…)
Hay tres clases de fantasías. La primera es la fantasía del placer, una forma de helado mental estrictamente destinada al gozo como son, por ejemplo, los en-sueños. La segunda clase de fantasía es la imaginación deliberada. Este tipo de fantasía es como una sesión de planificación. Se utiliza como vehículo para conducimos a la acción. Todos los acontecimientos —psicológicos, espirituales, financieros y creativos— empiezan con fantasías de esta clase. La tercera clase de fantasía es la que lo paraliza todo. Es la fantasía que impide emprender la acción más acertada en los momentos críticos.

Tenemos que buscar algo muy distinto de lo que buscaba la pequeña vendedora de fósforos. Tenemos que llevar nuestras ideas a un lugar donde se les preste apoyo. Este gigantesco paso va de la mano de la concentración en un objetivo: la búsqueda de alimento. Pocas de nosotras somos capaces de crear a partir exclusivamente de nuestro amor propio. Necesitamos que nos acaricien todas las caricias de alas de ángel habidas y por haber.

A la gente se le ocurren casi siempre ideas maravillosas: voy a pintar esta pared con un color que me guste; voy a crear un proyecto con el que toda la ciudad se sentirá identificada; voy a hacer unos azulejos para mi cuarto de baño y, si me gustan, venderé unos cuantos; reanudaré los estudios, venderé mi casa y me dedicaré a viajar, tendré un hijo, dejaré esto y empezaré lo otro, iré por mi camino, mejoraré mi conducta, ayudaré a enderezar esta injusticia o esta otra, protegeré a los que carecen de protección.
Todos estos proyectos necesitan alimento. Necesitan un apoyo vital de personas cordiales.
(…)
Los amigos que nos aman y contemplan calurosamente nuestra vida creativa son los mejores soles del mundo. Cuando una mujer, tal como le ocurre a la niña de las cerillas, no tiene amigos, se queda congelada por la angustia y a veces también por la cólera. Y en ocasiones, aunque tenga amigos, puede que éstos no sean unos soles. Es posible que la consuelen en lugar de hablarle de su situación cada vez más congelada. Pero el consuelo no tiene absolutamente nada que ver con el alimento. El alimento mueve a la mujer de un lugar a otro. El alimento es algo así como unos copos de cereales psíquicos.
La diferencia entre el consuelo y el alimento consiste en lo siguiente: si tú tienes una planta que está enferma porque la guardas en un armario oscuro y le diriges palabras tranquilizadoras, eso es un consuelo. Si sacas la planta del armario, la pones al sol, le das algo de beber y le hablas, eso es un alimento.
(…)
Cuando las mujeres están desconectadas del nutritivo amor de la madre salvaje, se encuentran en una situación equivalente a una dicta de mera subsistencia en el mundo exterior. El ego trata de vivir como puede con una mínima cantidad de alimento del exterior y cada noche regresa
una y otra vez del lugar donde empezó y allí se queda dormido, muerto de cansancio.
La mujer no puede despertar a una vida con futuro porque su desdichada existencia es como un gancho del que ella cuelga diariamente.
(…)
Históricamente, sobre todo en la psicología masculina, la enfermedad, el exilio y el sufrimiento se entienden a menudo como un desmembramiento iniciático que a veces reviste un gran significado. Pero en el caso de las mujeres hay otros arquetipos adicionales de iniciación que surgen de la psicología y las condiciones físicas; uno de ellos es el del alumbramiento, otro es el poder de la sangre y otros son el hecho de estar enamoradas o de recibir un amor nutritivo. El hecho de recibir la bendición de alguien a quien ellas admiran, el hecho de que alguien de más edad les imparta enseñanzas de una forma profunda y comprensiva son unos fuertes arquetipos que presentan sus propias tensiones y resurrecciones.

C l a r i s s a  P i n k o l a  E s t é s
M u j e r e s  q u e  c o r r e n  c o n  l o s  l o b o s

Compartiendo un cuento

La vendedora de fósforos

C l a r i s s a  P i n k o l a  E s t é s
M u j e r e s  q u e  c o r r e n  c o n  l o s  l o b o s


Había una niña que no tenía madre ni padre y que vivía en la espesura del bosque. Había una aldea en el lindero del bosque y ella había averiguado que allí podía comprar fósforos a medio penique y después venderlos por la calle a un penique. Si vendía suficientes fósforos, podía comprarse un mendrugo de pan, regresar a su cobertizo del bosque y dormir vestida con toda la ropa que tenía.

Vino el invierno y hacía mucho frío. La niña no tenía zapatos y su abrigo era tan fino que parecía transparente. Sus pies ya habían rebasado el color azul y se habían vuelto de color blanco, lo mismo que los dedos de las manos y la punta de la nariz.
La niña vagaba por las calles y preguntaba a los desconocidos si por favor le querían comprar cerillas. Pero nadie se detenía ni le prestaba la menor atención.

Por consiguiente, una noche se sentó diciendo: "Tengo cerillas, puedo encender fuego y calentarme." Pero no tenía leña. Aun así, decidió encender las cerillas.
Mientras permanecía allí sentada con las piernas estiradas, encendió el primer fósforo. Al hacerlo, tuvo la sensación de que la nieve y el frío desaparecían por completo. En lugar de los remolinos de nieve, la niña vio una preciosa estancia con una gran estufa verde de cerámica y una puerta de hierro adornada. La estufa irradiaba tanto calor que el aire parecía ondularse. La niña se acurrucó junto a la estufa y se sintió de maravilla.
Pero, de repente, la estufa se apagó y la niña se encontró de nuevo sentada en medio de la nieve. Temblaba tanto que los huesos de la cara le crujían. Entonces encendió la segunda cerilla y la luz se derramó sobre el muro del edificio junto al cual estaba sentada, y ella lo pudo atravesar con la mirada. En la habitación del otro lado de la pared había una mesa cubierta con un mantel más blanco que la nieve y sobre la mesa había platos de porcelana de purísimo color blanco y en una fuente había un pato recién guisado, pero justo cuando ella estaba alargando la mano hacia aquellos manjares, la visión se esfumó.
La niña se encontró de nuevo en la nieve. Pero ahora las rodillas y los labios ya no le dolían. Ahora el frío le escocía y se estaba abriendo camino por sus brazos y su tronco, por lo que ella decidió encender la tercera cerilla.
A la luz de la tercera cerilla vio un precioso árbol de Navidad, bellamente adornado con velas blancas, cintas de encaje y hermosos objetos de cristal y miles y miles de puntitos de luz que ella no podía distinguir con claridad.
Y entonces contempló el tronco de aquel gigantesco árbol que subía cada vez más alto y se extendía hacia el techo hasta que se convirtió en las estrellas del firmamento sobre su cabeza y, de pronto, una fulgurante estrella cruzó el cielo y ella recordó que su madre le había dicho que, cuando moría un alma, caía una estrella.
Como llovida del cielo se le apareció su amable y cariñosa abuela y ella se llenó de alegría al verla. La abuela tomó su delantal y la rodeó con él, la estrechó con fuerza contra sí y ella se puso muy contenta.

Pero poco después la abuela empezó a esfumarse. Y la niña fue encendiendo un fósforo tras otro para conservar a su abuela a su lado, un fósforo y otro y otro para no perder a su abuela hasta que, al final, la niña y su abuela ascendieron juntas al cielo, donde no hacía frío y no se pasaba hambre ni se sufría dolor. Y, a la mañana siguiente, encontraron a la niña muerta, inmóvil entre las casas. 

miércoles, 2 de mayo de 2012

Curiosidad

Una sabe que es un simple paracaidista que el viento llevó más allá de su imaginación.  Una sabe que jamás elegiría golpear a nuestra puerta o buscar nuestro nombre.


Sin embargo, una descorre las cortinas, disfraza los fosos y engalana el jardín.




¿Será la simple curiosidad que se atiza en la soledad o será la película sin taquilla que roza la cartelera?